Quererte como nadie nunca te ha querido.

Antes de que digas nada, déjame hablar... déjame decirte que en ti encontré más que una sonrisa, más que un abrazo, más que un te quiero. En ti encontré un verdadero amigo y consejero, a una persona que sin problema alguno pudo ser mi hermano, a una persona maravillosa que me ha dado su cariño y su amor de manera incondicional sin esperar nada a cambio, a una persona que siempre está ahí cuando hay rachas malas. ¿Sabes una cosa? Quizás es demasiado temprano para decirte que te amo y que estaré el resto de mis días contigo, pero si te puedo dar mi palabra que haré todo lo posible para hacerte feliz, por estar ahí cuando más lo necesites, y abrazarte cada vez que quieras y decirte lo muchísimo que te quiero. Tal vez no soy la persona perfecta, ideal para ti, tampoco te escribiré cada día del año una carta y te la enviaré como Noa lo hizo con Ali. Quizás tampoco aspiro a ser tu Julieta. Pero si puedo garantizarte quien soy, y  pesar de todo prometo hacerte tan feliz como nadie nunca lo ha hecho, cuidarte como nunca nadie te ha cuidado y quererte como nadie nunca te ha querido.